Habla temprano. Habla a menudo.

Una campaña para ayudar a los padres a iniciar y continuar conversaciones sobre el consumo de cannabis.
father having a difficult conversation with his daughter

Apoyando a los padres en Conversaciones actuales sobre el cannabis

“Habla temprano. Habla a menudo.” es una campaña regional de prevención liderada por la Colaboración para la Concientización y la Prevención de Sustancias de la Región Central Metropolitana (CMSAPC). La campaña está diseñada para apoyar a padres y cuidadores a mantener conversaciones abiertas, honestas y apropiadas para la edad de sus hijos sobre el consumo de cannabis y su impacto en el desarrollo cerebral, la salud mental y las oportunidades futuras de los jóvenes.

El objetivo es simple: brindar a las familias las herramientas necesarias para mantener conversaciones continuas, de modo que los jóvenes estén mejor preparados para tomar decisiones saludables e informadas. Ya sea que su hijo esté en la secundaria o se esté graduando, nunca es demasiado pronto ni demasiado tarde para iniciar la conversación.

Cómo responder: Mantenga la conversación

A continuación, se presentan algunas afirmaciones comunes que los jóvenes podrían hacer y orientación sobre cómo los cuidadores pueden responder de manera solidaria y basada en hechos que mantenga abierta la comunicación:

Es solo marihuana. Es natural.

Puedes decir:

Muchas cosas son naturales, pero eso no siempre significa que sean seguras, especialmente para el cerebro. El cerebro se sigue desarrollando hasta los 25 años aproximadamente, y consumir cannabis durante su crecimiento puede causar graves problemas de memoria, concentración y motivación.

"Es sólo una planta."

Puedes decir:

Es cierto, proviene de una planta. Pero no todo lo que proviene de una planta es seguro, especialmente para los jóvenes. El cannabis hoy en día es mucho más fuerte que antes, y consumirlo mientras el cerebro aún se está desarrollando puede causar problemas a largo plazo con la memoria, la motivación e incluso la salud mental.

“Todo el mundo lo está haciendo”.

Puedes decir:

Puede que lo parezca, pero la mayoría de los jóvenes de tu edad no consumen cannabis. Puedo mostrarte cifras reales si quieres. Sea como sea, que algo sea común no significa que sea seguro ni adecuado para ti. Me importa tu salud y quiero que tengas todas las oportunidades para prosperar.

“Sólo lo estoy probando una vez.”

Puedes decir:

Entiendo que probar algo una vez parezca inofensivo, pero incluso probar el cannabis puede afectar tu cerebro de maneras que quizás no sientas de inmediato. A veces, un consumo único lleva a un consumo más frecuente, sobre todo si lo usas para lidiar con el estrés o la presión. Quiero ayudarte a encontrar maneras más seguras de lidiar con esas sensaciones.

“Me ayuda con la ansiedad o el estrés”.

Puedes decir:

Sé que puede parecer que ayuda en el momento, pero usar cannabis para sobrellevar la ansiedad puede empeorarla con el tiempo, especialmente en los jóvenes. Hablemos de algunas maneras más saludables de manejar el estrés que no tengan efectos a largo plazo en la salud mental.

“Lo usaste cuando eras más joven”.

Puedes decir:

Tienes razón, lo hice, y he aprendido mucho desde entonces. Lo que sabemos ahora sobre cómo el cannabis afecta el desarrollo cerebral es muy diferente de lo que se entendía entonces. Mi trabajo ahora es asegurarme de que tengas toda la información para que puedas tomar decisiones inteligentes.

“¿Preferirías que bebiera alcohol?”

Puedes decir:

Ninguna de las dos es buena opción para tu salud en este momento. Ambas pueden ser perjudiciales para tu cerebro mientras aún se está desarrollando. No estoy aquí para castigarte, estoy aquí para protegerte y asegurarme de que tengas las mejores posibilidades de mantenerte sano y alcanzar tus metas.

“Ahora es legal, así que debe estar bien”.

Puedes decir:

El cannabis puede ser legal para mayores de 21 años, pero eso no significa que sea seguro para los adolescentes. Al igual que el alcohol o los cigarrillos, es legal, pero sigue siendo perjudicial, especialmente durante el desarrollo cerebral. Legal no siempre significa saludable. Mi trabajo es ayudarte a mantenerte seguro y a tomar decisiones que protejan tu futuro.

Mitos vs. Realidades Sobre Consumo de cannabis entre los jóvenes

Mito #1

“El cannabis no es adictivo”.

Hecho: Si bien no todos los que consumen cannabis desarrollan adicción, 1 de cada 6 adolescentes que consumen cannabis desarrollará un trastorno por consumo de cannabis. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), los adolescentes corren un riesgo especial porque su cerebro aún está en desarrollo.

Mito #2

Es solo marihuana. No es tan fuerte como otras drogas.

Hecho: El cannabis es mucho más potente hoy que hace una década. Según el Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas (NIDA), la concentración promedio de THC en los productos de cannabis ha aumentado de aproximadamente 4% en la década de 1990 a más de 15% en los últimos años, y algunos concentrados superan los 90% de THC.

Mito #3

“Es más seguro que el alcohol”.

Hecho: Si bien ambas sustancias conllevan riesgos, el consumo de cannabis durante la adolescencia está estrechamente vinculado a un deterioro del desarrollo cerebral, el aprendizaje y la memoria. Según la Facultad de Medicina de Harvard, el consumo temprano de cannabis puede provocar cambios a largo plazo en la función cerebral, especialmente en áreas relacionadas con la toma de decisiones y el control de los impulsos.

Mito #4

“El cannabis ayuda con la ansiedad y el estrés”.

Hecho: Algunas personas reportan alivio a corto plazo, pero el consumo regular de cannabis se ha asociado con un mayor riesgo de ansiedad, depresión e incluso psicosis, especialmente en adolescentes. Las Academias Nacionales de Ciencias encontraron evidencia sustancial que vincula el consumo de cannabis con el desarrollo de trastornos de salud mental, particularmente entre los consumidores frecuentes.

Mito #5

“Todo el mundo lo está haciendo”.

Hecho: La mayoría de los adolescentes no consumen cannabis. Según la Encuesta de Salud Adolescente de MetroWest de 2023, aproximadamente el 831% de los estudiantes de secundaria de la región reportaron no haber consumido marihuana en los últimos 30 días, lo que demuestra que la percepción de un consumo generalizado suele ser exagerada.

Cómo afecta el cannabis a la Cerebro adolescente

Diferentes partes del cerebro controlan la memoria, el juicio, la coordinación y las emociones; el cannabis puede alterar estas áreas, especialmente porque el cerebro adolescente aún está en desarrollo.

image of a human brain

Corteza prefrontal

Role: Toma de decisiones, control de impulsos y planificación

Impacto del cannabis: El THC puede interferir con el desarrollo de esta región, lo que dificulta que los adolescentes regulen su comportamiento y tomen decisiones inteligentes.

Por qué es importante: Esta zona continúa madurando hasta aproximadamente los 25 años.

Hipocampo

Role: Memoria y aprendizaje

Impacto del cannabis: El consumo regular de cannabis en adolescentes puede alterar la formación de la memoria y dificultar la retención de información nueva, especialmente en la escuela.

Por qué es importante: Cuanto antes se inicie el consumo de cannabis, más puede verse afectada la memoria a largo plazo.

Amígdala

Role: Emociones y respuesta al estrés

Impacto del cannabis: El THC puede aumentar los sentimientos de ansiedad o paranoia en algunas personas.

Por qué es importante: Los adolescentes ya experimentan emociones fuertes; el cannabis puede dificultarles afrontarlas de manera saludable.

Cerebelo

Role: Coordinación, equilibrio y control motor

Impacto del cannabis: El THC ralentiza el tiempo de reacción y perjudica la coordinación.

Por qué es importante: Esto puede afectar actividades físicas como conducir, andar en bicicleta o practicar deportes.

Núcleo accumbens

Role: Motivación y recompensa

Impacto del cannabis: El THC sobreestimula esta parte del cerebro, lo que puede alterar el procesamiento natural de la recompensa.

Por qué es importante: Esto puede aumentar el riesgo de adicción y hacer que sea más difícil sentirse motivado sin sustancias.
A medida que comienza el consumo de cannabis, la memoria a largo plazo puede verse más afectada.

Historias reales, Cambio real

Nuestro impacto se ve mejor a través de las historias de personas y familias de la comunidad.

“Me siento feliz cuando mis padres hablan conmigo de cosas importantes porque al final del día, ellos saben lo que es mejor para mí”.

Lucas

Hudson, Massachusetts

Escuchar a mi madre hablar de sus propias dificultades me hizo darme cuenta de que no tenía por qué ocultar las mías. Estas charlas nos unieron más que cualquier otra cosa.

Yasmín

Hudson, Massachusetts

Ojalá mis padres hubieran sido más abiertos conmigo durante mi infancia. Tuve que aprender mucho sobre las sustancias por mi cuenta. Todo habría sido más fácil si hubiéramos hablado de ello.

Kyla

Hudson, Massachusetts
Significa mucho saber que mis padres confían en mí lo suficiente como para tener conversaciones serias. Me hace confiar más en ellos también.

Angelina

Hudson, Massachusetts
“Cuando mi madre me contó sus experiencias, me ayudó a ver las cosas con más claridad y me resultó más fácil hablar con ella cuando tenía dificultades”.

Miguel

Hudson, Massachusetts